literature

Capitulos 29-36 By Datavoltus

Deviation Actions

VampireAngelDarkSoul's avatar
Published:
613 Views

Literature Text

Capítulo 29
Héroes Parte 3

Toa Amara y Siruma se preparaban para afrontar a la bestia nuevamente, pero ninguno de los dos tenía suficiente poder para poder enfrentarla y esperar sobrevivir. Podían repetir su ataque, pero no tendría la misma intensidad y su efecto sería aún menos eficiente que hace un par de segundos. Cuando la criatura ya se liberaba e intentó arremeter contra ellos, ésta se detuvo por unos instantes, seguía furiosa y eso empeoraba; pero ni Siruma ni Amara habían atacado aún.

- Muévanse de ahí, no creo aguantar mucho tiempo – Comentó una voz bastante vieja.

Siruma y Amara se voltearon corriendo hacia su salvador. Era un Toa de Armadura Azul con varios detalles en color hierro negro, muchos vendajes ahora cubrían gran parte de su cuerpo. Su brillante Kanohi, una Komau, seguramente era lo que ayudaba a los Toa a escapar comprándoles tiempo, aunque estaban seguros de que el poder magnético del Toa también les estaba ayudando.

- Espero que sus Kanohi me sirvan para algo más que para correr – Comentó Toa Lener con un aspecto de estar a punto de volver a la inconsciencia –, porque no podré estar aquí mucho tiempo -.

- Ehm... – Empezó a comentar Siruma.

- No hablemos de nuestras máscaras, Siruma. Entretén a la bestia, a ti no te podrá hacer nada – Interrumpió Toa Amara –. Usted Toa Lener, puedo sacarlo de la isla junto con sus Matoran bajo el agua, mi Kanohi me permite hacerlo y darle el poder a todo un grupo -.

- Yo no quiero escapar... salva a mi gente... – Comentó Toa Lener antes de caer al suelo, nuevamente inconsciente.

Aran tomó a Toa Lener y haciendo un gran esfuerzo, corrió con él sobre el hombro. Era una escena extraña que una Toa de Agua cargase a un Toa de Magnetismo en su hombro, pero era evidente su falta de agilidad; y una bestia con una nube de hielo, una Kanohi, un sable y un escudo pegados en su rostro corría hacia ellos.

- No puedo nublar su vista... ¡corre mas rápido! – Gritó Siruma.

De repente, todo pareció detenerse tras un metálico sonido. Amara, quien no quería voltear hacia atrás escuchó el sonido y de inmediato miró lo que pasaba: se trataba de Toa Kronax, él levantaba en el aire a la bestia como si cargara una roca de la mitad del peso de su cuerpo. Sus herramientas Toa, unas garras y su armadura brillaban de manera intensa, así como su Kanohi Pakari, la cual brillaba aún más de lo normal.

- Tú, maldito bicho – Comentó Toa Kronax caminando hacia la bestia, quien luchaba por liberarse de su agarre –, no podrás hacer que pierda el equilibrio ni lograrás que te suelte. Pero has consumido mi paciencia, así que ahora yo y mi querida amiga Aran te ayudaremos a dar un paseo bajo el agua... así te daremos una refrescada, y mi querido amigo Siruma te dará hielos para tu bebida... por si así lo deseas -.

A pesar de lo mucho que había dicho Kronax, no lo había escuchado el resto del equipo que llegaba corriendo a la escena, sólo vieron cuando el Toa de Tierra se sumergía junto con la Toa de Agua, mientras que Siruma flotaba en la superficie. Tardaron hora y media para salir de debajo del agua con la bestia.

- ¿Pero cómo... cómo obtuviste tanta fuerza? – Comentó Toa Aran, aún sorprendida.

- Parece que mis herramientas Toa son una expansión para mi Kanohi – Contestó Arkan –. Conocí a Toa que usaban la Pakari y nunca los vi levantar con tanta facilidad cosas tan pesadas como esta -.

- Bien, muy bien, mis queridos Toa – Llegaba una figura de armadura verde y dorado, con alas y acompañado de un grupo de cinco Matoran –. Veo que han encontrado a mi pequeño bicho, ¿dónde se encuentra? -.

Todos se sorprendieron al ver al Makuta comentar eso, en especial porque los Matoran a su alrededor sólo iban para reunirse con sus compañeros. No parecían aterrorizados: conocían bien al Makuta.

Continuará...

Capítulo 30
Retiro

Turaga Dakari llegó a la fortaleza de Datavoltus resguardado por un grupo de Matoran. Dakari, quien alguna vez fue uno de los Toa del equipo de Kronax, y junto con éste ultimo, Siruma y Amara (ahora Aran), había sido uno de los guardianes o Toa Hagah de Makuta Datavoltus.

El Turaga se alegró de ver a sus compañeros y de saber que la Matoran de nombre Amara no había muerto a manos del recién re-descubierto Kronax. La alegría embargaba al Turaga, pero él estaba aquí por negocios.

En una habitación, junto con Makuta Datavoltus, ambos esperaban la llegada de uno de los Toa...

- Ya llegué – Comentó Toa Komek entrando a la habitación.

- Bien, Toa Komek – Comentó Datavoltus –. Siéntate, voy a hablar con los demás Toa -.

Toa Komek quedó a solas con el Turaga. Komek no entendía por qué había sido convocado por Turaga, pero tenía que ser algo serio para haber sido llamado solo. El Toa entonces notó algo, el Turaga tenía consigo un gran saco, no pareciera que fuese algo muy pesado para que Turaga lo cargara solo desde su isla, pero sí era grande.

- Hola, Toa Komek – Saludó Turaga –. Vengo a hacerte una proposición, y a sellarla con un regalo -.

- Turaga, por favor, usted sabe que soy todo oídos y que no necesito regalos – Comentó el Toa.

- Oh, no, Toa. Este regalo sólo te servirá a ti, aunque tal vez le sirva a Toa Aran también... – Continuó Turaga.

- ¿De qué se trata, Turaga? – Preguntó el Toa de piedra con interés –. No el regalo, sino la proposición -.

- Bien, después de miles de años, por fin pude tener la oportunidad de viajar a la vieja Marakea – Comentó Turaga –, la isla de donde somos originarios los Toa y Yo... -.

- ¿Y bien? – Preguntó Komek.

- Turaga Jetron, el que nos dio sus poderes de Toa para convertirse en Turaga – Comentó Dakari –, él es el Turaga de la aldea. Pero hay un problema: desde hace cientos de años esa aldea ya no tiene un solo Toa -.

- ¿Quiere que nos unamos para ser los Toa de aquella isla?, ¿Yo, Kamari, Kronax y... – Preguntó Komek con una combinación de emoción y sobresalto en su voz.

- No exactamente, Toa – Interrumpió Turaga sacando de su gran saco una extraña Kanohi de color plateada.

Komek se levantó de su asiento, sobresaltado. Aquella Kanohi sólo la había visto en un rostro, o por lo menos, en un rostro al que odiaba, o que alguna vez odió. Entonces, de repente, tomó la máscara en sus manos y susurró.

- La Kakama Nuva, la Kanohi Nuva de la velocidad – Susurró el Toa.

- Ciertamente no conozco nada de aquella Kanohi, excepto que era una Kakama antes de caer a la protodermis energizada – Comentó Turaga -. ¿Cómo es que sabes qué es? -.

- Bien, Turaga, es... ¿Cómo decirlo? – Comentó el Toa de Piedra –. Es la Kanohi de Pohatu Nuva, aquel de quien me copiaron, lo sé por que tengo los recuerdos de su parte oscura conmigo -.

- Oh, entiendo, o por lo menos eso creo – Comentó Turaga –. Bien, volviendo a los negocios, sólo nos interesas tú como Toa para Marakea -.

- ¿Y los demás? – Preguntó Toa Komek.

- Ellos tiene una misión con Datavoltus – Comentó Dakari – ,una misión en la que no quiere que te inmiscuyas, porque cree que hay una trampa para ti -.

- ¿Y para eso arriesga a los demás? – Preguntó el Toa con un pequeño tono de enojo en su voz.

- No, el punto es que es un peligro para todos, incluyendo Marakea – Continuó Turaga –. Turaga Jetron te explicará apenas lleguen allá -.

- ¿Tú no irás conmigo? – Preguntó Toa Komek –. Está bien, si es tan importante, aceptaré. Pero apenas mi tarea esté cumplida, volveré con el equipo para asegurarme que estén a salvo y regresaré a tu aldea -.

- No te preocupes por el equipo – Continuó Turaga –. No iré contigo porque tomaré tu lugar. No soy un Toa, pero Makuta Datavoltus tiene planes para mí aquí -.

- Bien, pero... ¿cómo sabré llegar a Marakea? – Preguntó Toa Komek.

- Bien, allá afuera está esperando el Bohrok Va, supongo que recuerdas a nuestro viejo amigo.... bien, él sera tu guía. Usa esta máscara para llegar lo más rápido posible – Comentó Turaga –. Ah, y Datavoltus recomendó que te llevaras a Amara contigo, para no meter en riesgos a aquella Matoran -.

- Otra condición aparte de la máscara, Turaga – Comentó Komek –: pídale a Datavoltus que libere a Arkan, a usted si lo escuchara el Makuta, así como el Toa -.

- Lo haré – Comentó Turaga saliendo de la habitación junto con el Toa.

Capítulo 31
Héroes Parte 4

La situación del Rahi gigantesco se había arreglado, o por lo menos eso parecía. Pero una extraña situación parecía empeorar: la salud de Toa Lener decaía. Makuta dijo que no podía hacer nada por él, ya estaba muy deteriorado y teletransportarse podía ser riesgoso.

- Vamos, Makuta – Comentó Toa Amara con respeto –. Usted puede salvarlo -.

- No, Toa Lener está muy débil y podemos perderlo – Comentó el Makuta.

Una extraña luz salió del pecho del Toa de Aire Dakari, la luz salió disparada de inmediato hacia Toa Lener. Makuta se dio cuenta que los signos vitales de Toa Lener mejoraban mientras que los del Toa Dakari se iban reduciendo, por lo que lanzó un ataque al Toa de Aire, "apagando" la luz.

- Suficiente. Gracias Toa, pero queremos salvar al Toa, no perder otro en el intento – Comentó el Makuta, que sujetaba a los dos Toa inconscientes (Lener y ahora Dakari) y se teletransportaba hacia su base.

***

Las reparaciones en la isla no se hicieron esperar, en especial con cuatro Toa y una criatura helada que circundaba el océano para vigilar a la criatura congelada que mantenían ahí abajo. El poderoso Toa de Tierra que atraía rocas grandes para mejorar las defensas de la isla, el Toa de Aire que se teletransportaba con su Kanohi llevando equipo y el Toa de Plantas que restauraba las chozas y la Toa de Agua, que se encargaba de atender a los Matoran heridos junto con las demás Ga-Matoran que les ayudaban.

- ¿Qué pasará con Toa Lener y Toa Dakari? – Preguntó Toa Amara a una de las Ga-Matoran.

- Seguramente el Makuta los atenderá. Él tiene muchos equipos en su laboratorio para ello – Comentó la Ga-Matoran.

De pronto, en medio de la isla apareció un resplandor luminoso que desapareció para dar lugar a un Makuta y dos poderosos Toa. Eran los Toa Lener y Dakari, quienes ya estaban completamente recuperados.

- Me tengo que ir, Toa Dakari. Pero necesito hablar con su equipo de Toa dentro de una semana, cuando acaben de terminar con el desastre que hizo mi mascota – Comentó el Makuta –. Lamento las molestias, pero debo investigar primero quién saboteó mi laboratorio -.

Toa Dakari asintió, cubriéndose los ojos para protegerlos del resplandor. Después el Makuta había desaparecido; fue cuando se acercaron cuatro Toa y una masa Gélida a los dos Toa recién llegados a la isla.

- Dakari, ¿te encuentras bien? – Preguntó Toa Amara al acercarse y abrazar a su compañero.

- Sí... lo estaré apenas dejes de apretarme como un oso Graalok – Comentó el Toa de Aire.

- ¡Bien, todos escúchenme! – Comentó Matoran Orem –. Vamos a descansar todos, Toa y Matoran por igual. Mi equipo quiere hacer una celebración a aquellos que salvaron nuestro Hogar: a los Toa recién llegados y a Toa Lener, quien casi pierde la vida -.

Kronax parecía un poco disgustado, pero se puso a descansar y a divertirse. La fiesta era buena y se le había olvidado que ya no era un Onu Matoran obrero, sino un héroe Toa, así como sus compañeros. Incluso Siruma era exaltado por estos Matoran.

- ¡Viva Toa Siruma! – Gritaba un grupo de Po-Matoran.

Aunque el único "rostro" que se podía ver de Siruma era su propia Kanohi, Amara estaba completamente segura de que de alguna forma, él estaría sonriendo por ser reconocido como Toa por alguien más distinto a Turaga Jetron, Toa Kronax, Toa Lerum, Toa Dakari, o incluso por ella misma. Aunque Toa Kronax era bastante reservado, aún después del acto heroico de su compañero, sentía celos por no haber llegado a tiempo.

Continuará...

Capítulo 32
Viaje

Toa Komek, Matoran Amara y un extraño Bohrok Va se preparaban para viajar. Había pasado mucho tiempo desde que Turaga Dakari le había informado personalmente a Amara que debía irse a una aldea Matoran. Dakari les había informado sólo un poco de la historia de la aldea después de la salida de los Toa de ella; así mismo averiguó durante la bastante larga y emotiva despedida de la Matoran que un Turaga de Magnetismo, Turaga Lener, había dejado ahí situados a Tres Toa guardianes, quienes salieron en una misión y jamás habían regresado.

... Turaga Jetron me informará de ello entonces, aunque me temo lo peor ...

El Bohrok Va se limitó a mostrar la ruta más despejada para usar la máscara de manera cómoda, eso después de que desembarcaron y cuando se tenían que internar en el mismo continente del sur para encontrar la salida a la isla.

El viaje no fue muy largo gracias a la Kakama Nuva que poseía Toa Komek. Pero había algo que le preocupaba: hasta ahora se le había mencionado de que un ingeniero Matoran había creado un guardián artificial mecánico y que incluso lo había hecho con aspecto de Toa de Piedra. Toa Komek sentía que era una forma de convencerle a quedarse ahí.

***

La llegada fue algo que no se esperaba, los Matoran se encontraban arreglando un desorden. El viejo Templo de Toa Jetron había sido atacado y el Suva destruido, sin mencionar que el "guardián" mecánico de la isla había sido vencido.

- ¡Miren todos, es el Toa! – Gritó un Le-Matoran.

Todos los Matoran rodearon a Komek, Amara y al Bohrok Va y los escoltaron hacia una casa, donde se encontraban Ga-Matoran que entraban y salían muy apuradas. No fue sino hasta que un Po-Matoran atrajo la atención de Komek que este supo de qué se trataba.

- Turaga fue atacado... por una cosa – Comentó el Matoran –. Excavaba y desaparecía bajo la tierra, y se movía rápido, como un Nui Rama -.

- ¿Algo sobre su aspecto? – Preguntó el Toa.

- Cabeza de Rahkshi, pecho con una forma de armadura que juraría era de un Toa, incluso extremidades que diría que eran de un Toa, pero sin tejido orgánico en ellas, varias cosas que colgaban de su armadura... juraría que era una armadura únicamente, porque un robot no se mueve tan rápido – Comentó el Po-Matoran –. A propósito, debo irme a reparar su guardián -.

Komek vio al Po-Matoran alejarse corriendo en dirección del Templo. Un grupo de Matoran acarreaban una clase de máquina color blanco y otras partes y se preparaban para llevarlas a una choza que tenía equipos maltratados fuera de ella.

- Me habían dicho que el guardián era como un Toa de Piedra – Comentó Komek a un Onu Matoran que andaba por ahí.

- Oh no, ese era el cómplice del que atacó a Turaga – Comentó el Onu Matoran –. Pero el Guardián se encargo de él, aunque éste destruyó el Toa Suva, según comentó Turaga -.

Komek vio que tenía mucho trabajo que hacer por aquí. Casi sentía envidia por sus compañeros, que tenían el lujo de poder tener un equipo Toa.

... Toa desaparecidos, ataques a Turaga ¿Por qué no traje conmigo a Kamari y a mi escudero? ...

Continuará en Mi Destino...

Capítulo 33
La Búsqueda

Toa Kamari se encontraba en uno de los balcones de la fortaleza. Hacer guardia era una de las misiones que le había encomendado Makuta Datavoltus; aunque la última noche le había costado trabajo gracias a la intervención de un Skakdy encarcelado que ya se estaba fusionando con la roca de los calabozos. Ahora en la noche, sin aditamentos para visión nocturna, por lo menos podía darse el lujo de distraerse un poco.

- Uhmm – Bostezó la Toa –... Esto es demasiado aburrido. Mis herramientas necesitan algo de acción o si no... -.

La Toa se detuvo al momento de observar su espada. Últimamente no había tenido tiempo de revisar su arma, ya se había malacostumbrado, ya que su arma estaba hecha de Protoacero; la había hecho un artesano Matoran que le había dejado su insignia en ella. Lo que atrajo la atención de Kamari... era que no había insignia alguna en esta espada.

Kamari de inmediato activó uno de los interruptores de su espada, la cual al instante se separó en dos espadas cortas. Después la Toa golpeó con su espada un trozo de la roca del balcón y lo partió en dos rápidamente. Miró a su herramienta y no había sufrido ningún daño.

- Es Protoacero... y sigue haciendo lo mismo... pero esta no es mi espada – Comentó para sí la Toa –. Y no me he separado de ella desde que vine de la aldea -.

Kamari recordaba que desde la muerte de sus hermanos, ella no había soltado su espada. Su deseo de venganza y su instinto de supervivencia juntos le habían acostumbrado a mantenerse lo más alerta y lista posible para cualquier emboscada.

- ¿Algún problema? – Preguntó una voz desde lo oscuro del interior de la fortaleza.

Kamari de inmediato apuntó con sus dos espadas pequeñas ante el recién llegado, el cual de inmediato levantó las manos. Portaba una Kanohi Kualsi, la máscara del Rápido Desplazamiento; también llevaba una armadura de color verde oscuro con plata y una aterradora capa. Era Toa Arkan.

- ¿Qué es lo que haces aquí? – Preguntó la Toa de Agua.

- Mi turno de cuidar... ¿te acuerdas? – Comentó el Toa de Aire –. Debes descansar. Créeme: estás muy tensa -.

- ¿A ti que te importa si descanso o no? – Preguntó la Toa de Agua molesta.

- Me importa mucho, tanto como me importas tú – Comentó el Toa de Aire –. Ahora, descansa un poco -.

"Tanto como me importas tú"... la frase daba vueltas en la cabeza de Kamari, quien comenzaba a tranquilizarse. Había estado comportándose muy mal con el Toa que sólo quería que estuviera bien. Así que dio un gran respiro y después dijo:

- Discúlpame. Pero descubrí que tengo un problema – Comentó Kamari –: mi espada... esta espada no es mi espada... es una imitación. Alguien me la robó y la ha reemplazado por ésta -.

- Pues a juzgar por esta roca partida – Comentó Toa Arkan viendo el daño en el balcón –, creo que no deja de ser bastante buena -.

- Tú no entiendes. Mi espada fue un regalo hecho por mis compañeros Toa – Comentó Kamari –. Tal como las modificaciones a mi armadura, no me importaría tener un arma mejor... pero son las únicas cosas que me quedan de mis compañeros caídos -.

Toa Arkan se sentía mal también. Por muchos años pensó que había perdido a uno de sus mejores amigos en una misión para Makuta Datavoltus. Así mismo su mejor compañero, Toa Lerum, había sido transformado en una bestial forma de sí mismo por los Visorak; él sabia de pérdidas tanto como Kamari, sólo que ella había visto los cadáveres de sus compañeros, o lo que quedó de ellos, sin nadie que le dijera que había posibilidades de que regresaran.

- Podemos hacer esto – Comentó Toa Arkan –: podemos salir antes de que Datavoltus nos aliste para la misión, buscar tu espada original y visitar la tumba de tus hermanos. ¿Te parece? -.

- Gracias... – Comentó Toa Kamari abrazando fuertemente a Arkan.

- Sólo una pregunta: ¿para qué sirven las modificaciones en tu armadura? – Preguntó Toa Arkan –. Porque no se ve muy bien para una Toa como tú -.

- Eso te lo cuento en el camino – Contestó Kamari soltando al Toa.

Continuará...

Capítulo 34
Emboscada

Toa Arkan y Toa Kamari abandonaron al amanecer la fortaleza. Datavoltus no estaba contento, pero si esto podía bajarle los humos a Toa Arkan, le parecía una buena idea. Pero Datavoltus se encontraba ocupado en un experimento que le exigía a él, a Toa Siruma y a Turaga Dakari estar encerrados en el Laboratorio y usar el intercomunicador para dar órdenes a los Toa restantes en la fortaleza.

Pero lo peor estaba por comenzar. En el exterior de la fortaleza, haciendo guardia se encontraba Toa Lerum. Su forma bestial no era sólo un defecto: en ella estaban unas cuantas ventajas que los Rahi tenían y los Toa no, en especial un Toa de Vida Vegetal que estaba rodeado por un prominente bosque y un hermoso lago.

- Espera un momento – Susurró para sí el Toa mientras olfateaba un olor que no había olido en la fortaleza –. Intrusos -.

El bestial Toa se acercó al lago de manera imprudente, con su lanzador Rotuka preparado para atacar, así como su espada y su garra. Pero cuando se acercó lo suficiente, sintió cómo un par de tentáculos se envolvían en su cuello, cortándole la respiración hasta el punto de dejarlo inconsciente.

- Bien, ustedes vayan y traigan a nuestro objetivo. Y como ya escucharon al jefe: no maten a nadie – Comentó una criatura de color rojo con tentáculos naranja que acababan de soltar al Toa Hordika –. Cuando lleguen a los calabozos, corten los barrotes y dejen salir al prisionero -.

En el interior de la fortaleza...

La alarma había sonado, pero ni con eso Toa Aran ni Kronax pudieron ver a Makuta Datavoltus salir del laboratorio. Ahora sólo estaban ellos dos y un asesino de Toa contra los invasores, quienes parecían haber burlado todas las trampas.

- Kronax y yo los interceptaremos arriba – Comentó Kamari –, Datavoltus y los otros podrán cuidarse solos. Así que tú ve y cuida el calabozo -.

La criatura asintió, separándose de los dos Toa de Agua y Tierra que se dirigían hacia el exterior de la fortaleza. Pero ninguno de los dos Toa sospechaba lo que pasaría al abandonar el umbral.

- Aran, ¿estás segura de que podremos detenerlos? – Preguntó Toa Kronax –. Porque si son tan listos no creo que podamos.... ¡ARGGHHHHH! -.

Los dos Toa gritaron fuertemente y cayeron al suelo, inconscientes. Tres criaturas con espinas de color verde y con garras de Protoacero les habían derribado con sus poderes eléctricos. Ahora éstas se dirigían libremente hacia su objetivo, con un sólo guardia entre ellos y su objetivo.

En los calabozos...

El asesino de Toa se encontraba listo. Había usado su Kanohi para ocultarse y había obligado al Skakdy a no usar su poder para desactivarla; con sólo mostrarle sus garras de Protoacero los convenció.

De repente, las tres figuras entraron en el calabozo. Cargaban la lanza y la garra dorada del ahora preso Skakdy, el cual, activó su poder, inhabilitando la capacidad del asesino de Toa para mantenerse oculto.

Los monstruos con espinas se lanzaron sobre él. No usaron sus poderes eléctricos por la cantidad de barrotes metálicos que había ahí, mientras que uno de ellos rompía los barrotes de la prisión del Skakdy y le dejaba libre.

El asesino de Toa ya había malherido a sus dos contrincantes y sólo le quedaba uno. Se abalanzó sobre él, pero el Skakdy lo golpeó fuertemente con su garra, dejándolo inconsciente.

El monstruo con espinas se quedó quieto, pero eso no le bastó para que su hambriento "aliado" le perdonara la vida. El Skakdy se fusionó con la criatura, empezándole a salir múltiples picos en la espalda y brazos. Pero no le bastó, el Skakdy se abalanzó sobre los malheridos e indefensos monstruos que quedaban, aumentando su poder al fusionarse con ellos. Sólo quedó el malherido cazador de Toa, al cual cargó sobre su hombro.

El Skakdy rompió los muros de la fortaleza uno por uno, como si fuesen de madera y después se reunió con su extraño aliado en el agua. Para su sorpresa, el Skakdy descubrió que ahora ya era anfibio y podía estar dentro del agua sin problemas por usar sus poderes eléctricos.

... ¿Cuántos poderes nuevos habré obtenido con esto? ...

Continuará...

Capítulo 35
Crisis De Identidad

Toa Kamari se encontraba junto con Arkan en las ruinas de su vieja aldea. Ella consideraba esto una pérdida de tiempo; y lo era, ya que no habían encontrado casi nada. La mayor parte de las cosas pequeñas, incluso los cadáveres, habían sido succionados por un gigantesco hoyo negro creado por un Toa de Gravedad, como último recurso para detener a un cazador de Toa.

- No, esta... no puede ser – Comentó Kamari.

- Disculpa, pero me dijiste que había Matoran contigo cuando encontraron a Komek y Datavoltus – Comentó el Toa de Aire -. ¿Qué paso con ellos? -.

- No creo que quisieran volver aquí, donde sus hermanos fueron despedazados, así como sus héroes – Comentó Kamari con la mirada baja –. Incluso no hay rastro de huellas, mas que las nuestras. Todo se lo debió haber llevado el hoyo negro -.

- Supongo... pero, ¿cuándo fue la última vez que notaste que tenías el emblema en tu espada? – Preguntó Arkan –. Tal vez la perdiste lejos de aquí -.

- ¿Pero por qué tendría un reemplazo casi idéntico? – Preguntó Kamari - ¿Por qué alguien se preocuparía de que tuviera una espada casi igual? -.

- Cálmate, empiezas a sonar como el paranoico de Datavoltus... – Comentó el Toa de Aire, deteniéndose de golpe.

Tras Kamari, escondida tras las ruinas de una casa, una figura los observaba. El extraño, al darse cuenta que Arkan lo había visto se dirigió contra ellos, mostrando una silueta femenina portando una Kanohi Inmoral con aspecto de murciélago y dos espadas cortas.

Arkan empujó a Kamari al suelo y activó el poder de su Kanohi. Al siguiente instante estaba ya tan cerca de su oponente, que sólo le bastó un par de movimientos con sus espadas para atravesarle el pecho y dejarla morir en sus brazos. Cuando la Kanohi cayó de su rostro muerto, Kamari dio un grito ahogado, así como Arkan, quien reconoció el rostro de inmediato.

- Ka... ¿Kamari? – Preguntó Arkan, no tan seguro de si lo preguntaba a la figura muerta frente a él o a la Toa de Agua a sus espaldas.

- No... no puede ser posible. Yo estoy aquí... yo no puedo ser – Comentó Kamari.

Arkan sacó las espadas del pecho de la Toa de inmediato. Estaba seguro de que ella quería matarlos desde un principio, pero no podía entender por qué se parecía tanto a Kamari. Después vio sus espadas y se sorprendió.

- Tus espadas, Kamari, son idénticas a tus espadas – Comentó Toa Arkan.

Kamari se quedó paralizada ante lo que mencionó Arkan, el cual inspeccionó las herramientas de la Toa para buscar una señal de la insignia que Kamari le mencionó. Pero no había ninguna insignia: estas también eran réplicas.

- Kamari... ¿has pensado en la posibilidad de que tanto tú como ella son...? – Comentó pausadamente el Toa de Aire.

- ¿Réplicas?, oh no... esto es enfermizo – Comentó Kamari asustada –. No, no recuerdo algún laboratorio o algo por el estilo -.

- Kamari – Dijo el Toa de aire levantándose y abrazando a Kamari –, quiero que sepas que yo te apoyaré en esto. Y además, a que consideres lo que esto puede significar -.

- ¿Qué... qué significa esto?... ¿Que soy una vil copia? – Comentó Kamari entre lágrimas.

- Todavía no sabemos si tú eres una copia o no – Comentó Toa Arkan –. Pero tal vez... sólo tal vez... pueda existir la posibilidad de que aún tengas hermanos que te regalen una espada -.

Kamari entendió de inmediato. Se detuvo y tomando un largo respiro, se acercó a Arkan y le volvió a abrazar. Después de que se separó de él, le dijo:

- No le digas nada a nadie de esto – Comentó Kamari –. Sólo a Datavoltus, si él nos puede ayudar -.

- Lo prometo. Pero tú... ¿tú me prometes que Lerum no se enterará de que maté de nuevo? – Comentó Arkan –. Es tan molesto cuando se entera de que maté a alguien -.

- Sí... así se hará – Comentó Kamari, viendo al cadáver frente a ella y tomando la Kanohi Inmoral de éste.

- No creo que sea una buena Kanohi esa – Comentó Arkan.

- Es sólo... un recuerdo – Contestó la Toa de Agua.

Continuará...

Capítulo 36
Plan B

Toa Aran despertó. Descubrió que se encontraba en su cama en una habitación de la misma fortaleza de Makuta Datavoltus, pero lo que más le sorprendió es que ella estaba viva. Hace sólo unas horas había recibido descargas eléctricas que la reclamaron a la inconsciencia, ahora parecía estar bien; alguien la había llevado a su habitación y dejado sus herramientas a un lado de su cama, alguien que caminaba desesperadamente por el pasillo y que era demasiado ruidoso, aún cuando la puerta estaba cerrada.

De repente, Aran escuchó otro par de pies caminar. Su paso parecía menos nervioso como él, después ambos sonidos se detuvieron. Aran entonces se enfocó en escuchar por si estaban hablando.

- ¿Cómo está Kronax? – Preguntó Toa Arkan con un tono de irritación en su voz.

- Ellos están bien. Ya despertaron, les dije que descansaran un poco a ambos – Comentó la Toa de Agua - ¿Qué tal están Aran y Lerum? -.

- Lerum está bien. Dice que sólo recuerda haber sido emboscado por un par de tentáculos color naranja y después caer inconsciente, no recuerda más – Comentó Arkan.

- Pues difiere un poco de Kronax – Comentó Kamari –. Él me comentó que lo electrocutaron junto con Aran -.

- ¿Hay señales del asesino y de aquel Skakdy? – Preguntó Arkan.

- No, y relájate. Tal parece que en los calabozos hubo un combate, encontré garras de Protoacero y armaduras de criaturas vacías – Comentó Kamari –. Probablemente lo liberaron. Kronax recuerda que Aran mandó al asesino a custodiar al Skakdy -.

- ¿Crees que el asesino halla enfrentado a aquellas criaturas? – Preguntó Arkan.

- Sí, pero supongo que el Skakdy no es muy agradecido con quienes lo liberaron, creo que los comió hasta la muerte – Comentó Kamari –. Pero me preocupa el asesino -.

- Sí, lo sé. Era un buen elemento, a pesar de que era un asesino de Toa – Comentó Arkan.

- No. Me preocupa que vuelva a ser un asesino, no si le pasa algo grave – Comentó Kamari.

Arkan recordó que el asesino había matado a los hermanos de Kamari, así como a varios Matoran a cuidado de la Toa de Agua; así que se acercó a ella y le dio un abrazo. Ya se le empezaba a hacer costumbre abrazar a esta Toa; pero no la había soltado tan rápido apenas escuchó que la puerta de la habitación de Aran se abría.

- Hermano, hermana – Comentó Toa Aran -. ¿Alguien sabe qué es lo que pasó? -.

- Oh, hermana. Ustedes fueron emboscados y se llevaron al Skakdy y al Asesino – Comentó Arkan a Aran –. Pero gracias a Mata Nui que están bien -.

- ¿Y Siruma, Dakari y Datavoltus? – Preguntó la Toa de Agua preocupada.

- Ninguno de ellos ha dado la cara. Tal parece que no les importa... – Respondió Arkan enfurecido.

- No podíamos – Comentó la voz de Datavoltus a través de un comunicador –. Sólo activamos la alarma -.

- Perfecto, ¿y ahora qué? Ya se fueron, seguramente tenemos una asociación de villanos que podría darnos una paliza mayor que la que el Skakdy podía darnos solo – Comentó Arkan –, pudiendo detenerlos tú mismo. Eres un Makuta -.

- Cállate y escucha. Aran, tú eres la líder del equipo ahora. Dirigirás al equipo hacia la ubicación de la base enemiga – Comentó Datavoltus –, en la entrada del Laboratorio hay un radar donde lo pueden ubicar, así como equipo para Kamari y para ti -.

- ¿Qué clase de equipo? – Preguntó Toa Aran.

- Se los diré en cuanto lo vean – Comentó Datavoltus.

- ¿Pero vendrá Toa Siruma? – Preguntó Toa Aran.

- No. Él no irá, por ahora – Comentó Datavoltus –. Pero los alcanzará junto conmigo -.

Los tres Toa reunidos se miraron entre sí. Sólo serían cinco Toa contra quién sabe cuántos enemigos.

- Que Mata Nui los acompañe – Sonó en el intercomunicador la voz de Turaga Dakari.

Continuará...
Son los capítulos de las ficciones de mi querido amigo :icondatavoltus: , el cual me pidió el gran favor de que los compusiese en lo que estuviera mal y que los publicara en mi galería.
Yo también espero que él pueda publicar estos capítulos pronto en su galería y que opine si le parecieron bien mis correcciones.
Ya sabes Data, si necesitas algo más, dímelo y te hago otros favores más. Después de todo, me encanta escribir :XD: . Y también espero que pueda publicar estos capítulos en :iconbioniclelatino: para deleite de los fans de Bionicle!! :D . Yo también espero que estos capítulos estén en tu galería muy pronto...

Correcciones por: :iconvampireangeldarksoul:
Autor original: :icondatavoltus:

Disfruten estos capítulos, porque la verdad disfruté mucho haciéndolos y hasta me quedé suspensa por leer más porque esta historia está realmente increíble, me encantó mucho :) . Espero poder leer más porque me quedé con esa duda de: "¿Y ahora qué pasará?"...
© 2011 - 2024 VampireAngelDarkSoul
Comments0
Join the community to add your comment. Already a deviant? Log In